Como cada 27 de julio, se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer de cabeza y cuello para llevar a cabo labores de sensibilización y concienciación a la sociedad para que se ponga el foco en la importancia del diagnóstico de este tipo de cánceres y la necesidad en cuanto al tratamiento precoz, añadiendo siempre el gran valor de la prevención.

A pesar de ser uno de los cánceres más desconocidos entre la población, no es así en cuanto a su incidencia. En España, se diagnostican 15.000 nuevos casos de cáncer de cabeza y cuello cada año, siendo así el quinto tumor con mayor impacto a nivel global y el sexto más común en nuestro país.

Este tipo de cáncer representa el 5% de todos los tumores que se diagnostican, por lo que los expertos lo consideran infrecuente. Al estar muy relacionado con el tabaco, es un tipo de tumor que se da sobre todo en los hombres -10 casos por cada 1 en mujeres-, debido al alto porcentaje de fumadores, aunque estas cifras están cambiando por el aumento del hábito tabáquico en las mujeres, variando así la tendencia.

Además, estos tumores se dan sobre todo en pacientes cuya media de edad supera los sesenta años.

¿Dónde se origina el cáncer de cabeza y cuello?

Suele tener su origen en las células escamosas que rodean las superficies de la mucosa de la cabeza y el cuello -de ahí su nombre- y que pueden aparecer en el interior de la boca, en la garganta o en la laringe. Aunque no sólo pueden formarse ahí, sino que también pueden originarse en las glándulas salivales, en los músculos o los nervios de la cabeza y del cuello.

Debido a que es un tipo de cáncer muy variado en cuanto a su origen y a su comportamiento, la Sociedad Española de Oncología Médica – SEOM – los divide en 5 grandes grupos dependiendo de dónde se encuentre localizado:

  • Cáncer de laringe e hipolaringe: se trata del sexto cáncer con mayor mortalidad en hombres y tiene una gran relación con el abuso del consumo de tabaco. Entre sus síntomas más habituales se encuentran la ronquera, la disfagia, la dificultad para respirar o la aparición de dolor en la zona.
  • Cáncer de nasofaringe: al ser la parte más alta de la faringe es un lugar de paso, por lo que sus síntomas tardan en aparecer y suelen estar relacionados con la dificultad para respirar, oír o con la aparición de un sangrado nasal. Este tumor se considera “raro”, puesto que tiene una incidencia de 1 caso por cada 100.000 habitantes en un año. Entre las causas de este tipo de cáncer se encuentran el consumo de alimentos salados, la infección por el Virus de Ebstein-Barr o causas genéticas en el paciente.
  • Cáncer de orofaringe y cavidad oral: éste incluye todos los tumores que se desarrollan en cualquier punto de la cavidad oral. Existe un aumento de su incidencia en los últimos años relacionado con el virus del papiloma humano.
  • Tumores de glándulas salivares: se pueden llegar a presentar a cualquier edad, aunque la mayoría afectan a los adultos. Los de carácter benigno tienen más presencia en las mujeres y los malignos están frecuentes en ambos sexos.
  • Tumores de la cavidad nasal y senos paranasales: tan sólo suponen el 0’2% de todos los tumores malignos que se diagnostican. Como se desarrollan en las cavidades, estos tumores suelen llegar a alcanzar un gran tamaño antes de que los síntomas aparezcan.

La importancia de la detección temprana

La mayoría de los síntomas de este tipo de cáncer aparecen como bultos en el cuello, llagas, dolor de garganta, dificultad al tragar o ronquera en la voz. Es necesario que, si alguno de estos síntomas permanece con el paso de los días, se acuda de manera inmediata a un especialista para que se lleve a cabo una revisión.

Causas y factores de riesgo

Este tipo de tumores tienen una causa principalmente ambiental, es decir, de procedencia externa, ya que los factores de riesgo que más predominan son el tabaco y el alcohol.

Consumir tabaco produce un aumento del riesgo de tumores de cavidad oral, orofaringe, hipofaringe y laringe; cuanto más elevado sea el consumo, mayor riesgo de cáncer. En cuanto al alcohol, su consumo multiplica por cinco el riesgo de padecer cáncer de laringe y aumenta aún más si se mezcla con el tabaquismo.

Aunque el tabaquismo y el alcoholismo son dos de los factores más predominantes, existen otros como la dieta, la higiene bucal, las infecciones o la irradiación que están relacionados con este cáncer.

IRCA y su implicación con estos tumores  

Para este tipo de cáncer es necesario el trabajo de todo un equipo multidisciplinar para permitir así la mejoría en cuanto a la supervivencia y a la calidad de vida.

En IRCA damos a nuestros pacientes un tratamiento eficaz, de la mano de la tecnología más innovadora y con un equipo médico especializado con la máxima cualificación, para tratar lesiones cerebrales, de cabeza y cuello.

Mediante el ZAP-X, el sistema de radiocirugía estereotáctica cerebral más avanzado en la actualidad, se trata con gran precisión, de forma no invasiva y eficaz las lesiones benignas y malignas de cerebro, cabeza y cuello. Esta tecnología es capaz de controlar y dirigir la radiación, para administrar el tratamiento sin tener que dañar las estructuras sanar de alrededor.

Si quieres saber más sobre todo lo que lleva a cabo el equipo de IRCA, no dudes en ponerte en contacto a través del teléfono 911 09 19 46.